Nota 169
Notas de Ella Boudreaux Mayo tomadas de
THE COMPLETE WORKS OF SAINT JOHN OF THE CROSS
[LAS OBRAS COMPLETAS DE SAN JUAN DE LA CRUZ]
Por San Juan de la Cruz
Este libro traducido del Español original al Inglés por E. Allison Peers.
Cómo Conducirse en la Aridez de la Noche Oscura
Notas de Ella Boudreaux Mayo tomadas de
THE COMPLETE WORKS OF SAINT JOHN OF THE CROSS
[LAS OBRAS COMPLETAS DE SAN JUAN DE LA CRUZ]
Por San Juan de la Cruz
Este libro traducido del Español original al Inglés por E. Allison Peers.
Cómo Conducirse en la Aridez de la Noche Oscura
San Juan dice que el principiante que está en la aridez de la Noche Oscura mucho teme haber perdido el camino en la jornada espiritual y este pensamiento le es más penoso que la esterilidad (aridez) que siente en la cabeza [facultades] sin poder entenderla. Recela que se han acabado sus bienes espirituales pues ya no recibe consuelos de Dios. No puede meditar por mucho esfuerzo que haga [aridez] y no sabe como comportarse en esta situación espiritual. No se da cuenta que Dios está sacando al alma de la vida del sentido a la del espíritu, lo que San Juan llama la Noche Oscura. Dios le está quitando la habilidad de meditar y dándole, a cambio, la contemplación infusa que, al principio, es tan leve que podría no notarla ya que gustaba de las cosas del sentido y no las del espíritu.
Desde que el principiante ya no tiene ningún poder para discurrir con las facultades cuando trata de orar, San Juan le aconseja quedarse en el sosiego en que se encuentra en este momento y desistir de tratar de reflexionar con sus facultades (entendimiento, memoria y voluntad). De otro modo, perderá el bien espiritual de contemplación que se está infundiendo en su alma. Dice San Juan que en este momento, el imaginar y discurrir estorban la obra espiritual que Dios hace. Le dice que descanse de todo pensamiento, con una advertencia amorosa hacia Dios, sin ningún cuidado ni deseo de tener una experiencia espiritual o sentir a Dios. No debe añorar una experiencia espiritual porque esto impide que el alma [facultades] experimente el ocio sosegado de la contemplación. Si el principiante no permanece quieto de cuerpo y facultades en este momento, perderá este bien maravilloso.
San Juan dice que el principiante debe perseverar en paciencia y confianza, porque Dios sabe lo que hace. Dios nunca abandona a los que le buscan. El sabe lo que es mejor para cada alma y le da lo necesario hasta llevarla a la luz clara y pura del amor, por medio de otra noche que está por venir; esto es, si el alma la amerita pasando con éxito por esta primera noche. San Juan dice que la contemplación es una infusión amorosa y pacífica de Dios que enardece al alma (facultades) en el espíritu de amor si ella no se lo impide buscando algún apoyo en afectos y conocimiento. San Juan dice al principiante en aridez, que no haga caso si sus facultades (entendimiento, memoria y voluntad) se pierden en estos momentos. Al no estorbar la operación de la contemplación infundida por Dios, recibirá más de ella y el espíritu se encenderá con el amor de Dios. El alma sentirá un ardor interior y el amor que esta oscura y secreta contemplación trae consigo.
Desde que el principiante ya no tiene ningún poder para discurrir con las facultades cuando trata de orar, San Juan le aconseja quedarse en el sosiego en que se encuentra en este momento y desistir de tratar de reflexionar con sus facultades (entendimiento, memoria y voluntad). De otro modo, perderá el bien espiritual de contemplación que se está infundiendo en su alma. Dice San Juan que en este momento, el imaginar y discurrir estorban la obra espiritual que Dios hace. Le dice que descanse de todo pensamiento, con una advertencia amorosa hacia Dios, sin ningún cuidado ni deseo de tener una experiencia espiritual o sentir a Dios. No debe añorar una experiencia espiritual porque esto impide que el alma [facultades] experimente el ocio sosegado de la contemplación. Si el principiante no permanece quieto de cuerpo y facultades en este momento, perderá este bien maravilloso.
San Juan dice que el principiante debe perseverar en paciencia y confianza, porque Dios sabe lo que hace. Dios nunca abandona a los que le buscan. El sabe lo que es mejor para cada alma y le da lo necesario hasta llevarla a la luz clara y pura del amor, por medio de otra noche que está por venir; esto es, si el alma la amerita pasando con éxito por esta primera noche. San Juan dice que la contemplación es una infusión amorosa y pacífica de Dios que enardece al alma (facultades) en el espíritu de amor si ella no se lo impide buscando algún apoyo en afectos y conocimiento. San Juan dice al principiante en aridez, que no haga caso si sus facultades (entendimiento, memoria y voluntad) se pierden en estos momentos. Al no estorbar la operación de la contemplación infundida por Dios, recibirá más de ella y el espíritu se encenderá con el amor de Dios. El alma sentirá un ardor interior y el amor que esta oscura y secreta contemplación trae consigo.
Derechos de Autor, Copyright © 2015 & 2016
- John of the Cross, Saint [San Juan de la Cruz], The Complete Works of Saint John of the Cross, Volme I [Las Obras Completas de San Juan de la Cruz Volumen I], traducido y editado por E. Allison Peers, Maryland; The Newman Press. reimpreso en 1957.
- John of the Cross, Saint [San Juan de la Cruz], The Complete Works of Saint John of the Cross, Volme II & III [Las Obras Completas de San Juan de la Cruz Volumen II], traducido y editado por E. Allison Peers, Maryland; The Newman Press. reimpreso en 1953.