Nota 47
Notas de Ella Boudreaux Mayo tomadas de
HOW TO CONVERSE CONTINUALLY AND FAMILIARLY WITH GOD
[Cómo Conversar Continua y Familiarmente con Dios]
Por San Alfonso De Liguori
Fue el fundador de la Congregación del Santísimo Redentor. Es un Doctor
de la Iglesia que escribió un gran número de obras dogmáticas y ascéticas,
casi todas en el vernacular descritas como “simples en estilo” y “de doctrina sólida.”
Su correspondencia era “prolífica y 1,451 cartas fueron recuperadas.”
Traducido del italiano, por el Reverendo L. X. Aubin, C.Ss.R.
Dios está Dentro de Ti
Notas de Ella Boudreaux Mayo tomadas de
HOW TO CONVERSE CONTINUALLY AND FAMILIARLY WITH GOD
[Cómo Conversar Continua y Familiarmente con Dios]
Por San Alfonso De Liguori
Fue el fundador de la Congregación del Santísimo Redentor. Es un Doctor
de la Iglesia que escribió un gran número de obras dogmáticas y ascéticas,
casi todas en el vernacular descritas como “simples en estilo” y “de doctrina sólida.”
Su correspondencia era “prolífica y 1,451 cartas fueron recuperadas.”
Traducido del italiano, por el Reverendo L. X. Aubin, C.Ss.R.
Dios está Dentro de Ti
Nunca debemos olvidar que Dios está presente dentro de nosotros. Debemos hablar con El tan a menudo como sea posible. Decirle todo. Decirle lo que venga a la mente. Dios se alegra cuando le contamos todos nuestros asuntos triviales. El ya sabe todo lo que le digamos, pero le gusta oírlo. Nuestro Salvador sabía que Lázaro estaba muerto pero no reveló que ya lo sabía hasta que Magdalena se lo dijo. Entonces la consoló al resucitar a su hermano.
Cuando estamos sufriendo cualquier cosa, debemos recurrir en seguida a El y pedirle su ayuda. Entonces El nos consolará o nos dará fortaleza para sufrir esa prueba pasajera, y será mejor que hayamos sufrido la prueba a que hubiéramos sido liberados de ella. Podemos ofrecerle todas nuestras aflicciones y conformar nuestra voluntad a la suya. “Venid a Mí, todos los que estáis fatigados y sobrecargados y Yo os daré descanso.” (Mt. 11:28)
Cuando estamos sufriendo cualquier cosa, debemos recurrir en seguida a El y pedirle su ayuda. Entonces El nos consolará o nos dará fortaleza para sufrir esa prueba pasajera, y será mejor que hayamos sufrido la prueba a que hubiéramos sido liberados de ella. Podemos ofrecerle todas nuestras aflicciones y conformar nuestra voluntad a la suya. “Venid a Mí, todos los que estáis fatigados y sobrecargados y Yo os daré descanso.” (Mt. 11:28)
Derechos de Autor, Copyright © 2015 & 2016