Nota. 126
Notas de Ella Boudreaux Mayo tomadas de
A MANUAL OF MYSTICAL THEOLOGY
[MANUAL DE TEOLOGÍA MÍSTICA]
Por el Rev. Arturo Devine, C.P.
Fue Superior y Provincial Consultor del Retiro San
Mungo en Glasgow, Irland, y Lector de Teología.
Tentaciones Contra la Fe
Notas de Ella Boudreaux Mayo tomadas de
A MANUAL OF MYSTICAL THEOLOGY
[MANUAL DE TEOLOGÍA MÍSTICA]
Por el Rev. Arturo Devine, C.P.
Fue Superior y Provincial Consultor del Retiro San
Mungo en Glasgow, Irland, y Lector de Teología.
Tentaciones Contra la Fe
El Reverendo Devine nos dice que el objeto de escribir sobre Teología Mística es el explicar las gracias extraordinarias de la vida sobrenatural del alma. Nos explica cómo las pruebas, que a veces son muy grandes, son permitidas por Dios para prepararnos a la vida sobrenatural de la contemplación infusa. Estas pruebas están colmadas de peligros para la fe y otras dificultades y es importante tener conocimiento de esto para poder avanzar y no retroceder cuando las experimentamos. Nuestro avance a un grado oculto de contemplación pasiva por lo general se lleva a cabo después de haber comprobado nuestra fidelidad a Dios en una de estas grandes pruebas. El Rev. Devine hace uso de la “Theologia Divi Thomae” por Tomás A. Vallgornera, para ayudarse a explicar esta etapa de purificación pasiva del espíritu, o de la parte intelectual del hombre que consiste en el intelecto y la voluntad. Estas dos facultades permanecen con el alma cuando el alma se separa del cuerpo a la muerte.
El Rev. Devine dice que ya que el intelecto y la voluntad están en el cuerpo mientras vivimos, requieren la ayuda de los sentidos para sus operaciones. El alma entonces es afectada durante esta etapa de la purgación pasiva o la Noche del Espíritu. Esta purgación de la vida espiritual es causada por la contemplación divina que penetra en el alma y trae a nuestro conocimiento todas nuestras faltas y defectos. La revelación de nuestros pecados causa mucha pena al alma, envolviendo a la mente en oscuridad del espiritu. El Reverendo dice que la mente se queda abandonada en la oscuridad de sus propias miserias. La vista de nuestros pecados también le causa a la voluntad gran aflicción. Descubrimos que no podemos meditar, no importa cuanto nos esforcemos. Esta gracia de la ligadura de los sentidos y el hecho de que no podemos liberarnos de este estado de oscuridad por nuestro propio esfuerzo, es causa de humildad. Dios, quien nos eleva a este grado de la vida espiritual, nos sacará de él cuando esta parte de nuestra purificación esté completa. Dios nos permite sufrir nuestro Purgatorio ahora, aquí en la tierra, y debemos aceptar todos nuestros sufrimientos de todo corazón.
Este santo sacerdote nos dice que todas las persecuciones y adversidades que vienen sobre nosotros son usadas con el fin de purificar el alma. Cuando aceptamos estas pruebas con fidelidad a Dios, El puede auxiliar al alma en su avance hacia el estado de perfección. El Rev. Dice que merecemos este castigo y debemos aferrarnos al pensamiento de que este estado de la ligadura de los sentidos y esta oscuridad están purificando la raíz de nuestros pecados pasados. Cuanto más grandes sean los pecados que hayamos cometido en el pasado, tanto mayor es la angustia en esta noche purgativa. Después de esta purgación viene el estado dichoso de la Oración de Quietud, siempre y cuando Dios así lo desee. Para los que tenemos un pasado muy pecaminoso, puede tomar más tiempo antes de ser elevados a ese grado más alto de santidad. Dice que la purificación divina del espíritu de quienes son más inocentes puede avanzarlos al siguiente grado más rápidamente.
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